Denuncian que el deterioro de la sanidad pública de Madrid alimenta y financia al sector privado
Denuncian que la infrafinanciación y el deterioro del sistema público actúan como un «círculo vicioso» que, de forma sistémica, impulsa la «fuga de usuarios» a entidades privadas como Quirónsalud y Ribera
GETAFE/02 NOVIEMBRE 2025.- Plataformas ciudadanas, sindicatos y partidos de la oposición de la Comunidad de Madrid han intensificado sus críticas en el marco del debate sobre la sanidad regional . Denuncian que la infrafinanciación y el deterioro del sistema público actúan como un «círculo vicioso» que, de forma sistémica, impulsa la «fuga de usuarios» a entidades privadas como Quirónsalud y Ribera. Este proceso, señalan los críticos, se cierra con la transferencia de recursos públicos a estas empresas mediante conciertos y derivaciones, garantizando su sostenibilidad a costa de la administración.
El argumento central de los colectivos se basa en la tesis de que la debilidad del sistema público madrileño es un factor que impulsa al privado. El deterioro del servicio se inicia, según el análisis, por una insuficiencia de recursos y la infrafinanciación de los centros públicos. Esta situación se ve agravada por las malas condiciones laborales y el burn out del personal sanitario.
La combinación de la falta de personal cualificado y la alta demanda poblacional, impulsada por el crecimiento y el envejecimiento demográfico, provoca la saturación del sistema asistencial. El resultado directo de esta saturación es el incremento de las listas de espera y las demoras para los usuarios.
Ante la saturación del sistema público, los pacientes se ven empujados a ejercer su alternativa de «libre elección», lo que resulta en la fuga de usuarios hacia el sector privado. Hospitales de gestión privada como Ribera Salud o Quirónsalud, junto a aseguradoras como Sanitas o Adeslas, captan esta demanda creciente.
Este aumento en la actividad privada es el que se conoce como «círculo virtuoso» para el sector, ya que permite a estas entidades incrementar su capacidad de atención. Además, el crecimiento del sector privado se retroalimenta mediante la transferencia de recursos públicos. Esto se logra a través de conciertos, externalizaciones y el pago por derivaciones que cierran el círculo de financiación.
El Gobierno de la Comunidad de Madrid, por su parte, ha negado de manera reiterada las acusaciones de privatización del sistema. La administración regional defiende sus políticas de diversificación de la gestión como una vía necesaria para garantizar tanto la sostenibilidad como la calidad del servicio ofrecido a los ciudadanos. El conflicto, por tanto, se mantiene en el centro del debate político y social de la región.

