Vivienda

Getafe clama por el derecho a la vivienda: “No es un negocio, es un derecho”

Centenares de vecinos se manifiestan para exigir medidas urgentes ante la escalada de precios, la especulación inmobiliaria y el desmantelamiento del tejido vecinal

GETAFE/24 MAYO 2025.- Getafe alzó ayer la voz. Centenares de vecinas y vecinos recorrieron las principales calles del municipio en una multitudinaria manifestación convocada bajo el lema “La vivienda es un derecho, no un negocio”. Desde el emblemático Lazo hasta las puertas del Ayuntamiento, organizaciones sociales, sindicales, políticas y vecinales se unieron para exigir soluciones inmediatas ante la creciente crisis habitacional que sacude la ciudad.

La protesta se produce en un momento crítico: Getafe se ha convertido en la ciudad más cara del sur de Madrid. El alquiler medio ya alcanza los 1.084 euros mensuales y el precio de venta de la vivienda ha subido un 14,1% en tan solo un año. Para los convocantes, estas cifras reflejan una situación insostenible que amenaza con expulsar a las familias trabajadoras de sus propios barrios.

“Estamos viendo cómo la especulación y los grandes tenedores están vaciando nuestras calles, cerrando comercios de toda la vida y rompiendo la red de apoyo entre vecinos”, denunciaron durante la lectura del manifiesto. En este sentido, la movilización no solo apunta al encarecimiento de la vivienda, sino también a un modelo de ciudad que, aseguran, “prioriza el beneficio económico sobre la vida digna de su gente”.

Entre las principales demandas figura la declaración de Getafe como zona de mercado residencial tensionado, medida que permitiría limitar subidas abusivas en los precios del alquiler. Para ello, se ha iniciado una campaña de recogida de firmas que busca presionar a las administraciones competentes.

El manifiesto también reclama la intervención decidida de las instituciones públicas mediante la implementación de medidas estructurales: creación de un parque público de alquiler social, control del uso especulativo del suelo urbano, y regulación del turismo residencial, que está agravando aún más el problema.

Desde los colectivos participantes, el mensaje final fue rotundo: “No vamos a permitir que se criminalice a quienes luchan por una sociedad más justa, más libre y más diversa. Queremos barrios para vivir, no para enriquecer a unos pocos”.

Con esta movilización, Getafe se suma al creciente clamor ciudadano que, desde distintos puntos del país, exige una respuesta firme frente a la emergencia habitacional. Porque, como gritaron ayer en las calles, la vivienda no es un privilegio: es un derecho.

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